El titular del periódico (ironías de la vida) en su sección VIVIR cuenta lo siguiente: EL FIN DEL MUNDO EN LOS TRIBUNALES, son ganas de hacer un titular bobalicón como el mundo intelectual que nos rodea porque lo que en realidad cuenta es que un acelerador de partículas (dichosa hermosura estética) ha sido construido en un túnel circular subterráneo de 27 kilómetros(si Borges levantara la cabeza)entre Francia y Suiza. Le llaman el anillo del acelerador y me recuerda un poco al matrimonio si se sigue escrupulosamente su metáfora.
El principio básico del acelerador es hacer que se atraigan partículas con carga positiva y a través de un agujero cargado eléctricamente (es todo deliciosamente sensual) para luego ser repelidas por los elementos de carga contraria. Desde luego este proceso va adquiriendo velocidad y propulsa protones de hidrógeno al (pásmate) 99,9999% de la velocidad de la luz hasta generar 1.000 millones de colisiones de protones por segundo.
Pero si analizamos la realidad, existe la posibilidad de generar con tamaña fuerza uno o múltiples agujeros negros que podrían tragarse al planeta o que los quarks generados se unieran entre sí de manera diferente a la habitual y contagiaran toda la materia de la Tierra convirtiéndola en materia extraña.
Los americanos, que son los que se preocupan por estas cosas, ya han denunciado estos hechos ante un tribunal. Se pasan la vida gestando superhéroes.
Me encanta vivir en el mundo. Hermoso mundo. Me recuerda a Eliot:
"En mi fin está mi principio"
1 comentario:
¡María, te quieroooooo!
¡Habrá reinas en el mundo, pero como tú ningunaaaaa!
Espero que vuelvas pronto por Sevilla y nos deleites con tus excelentes poemas pasados por alcohol jajajaj
Salud y Libertinaje
Publicar un comentario