19.1.11

EL MÉTODO CIENTÍFICO DEL RUMOR o el cansancio de que todo se dignifique cuando lo tildamos de científico

Hoy estoy terca de mundo, con ganas de sublimarlo todo, de teorizar sobre lo milimétrico, de hacer el método científico de un rumor, de competir con una piedra. Veo a la señora de enfrente exponer un rumor que ha recogido de otras puertas, que emite desde la suya con tantos añadidos como un barco hundido se adhiere especies marinas en el costado y muestra una imagen distinta con una base idéntica. Observo el fenómeno presentado de forma casual, extraigo la conclusión de que el rumor solo es verdad si la experiencia general se precipita hacia lo particular: lo que sucedió y lo que se le añade. Un rumor es un alud que añade nieve poco a poco, si esto no sucediese no estaría en constante movimiento. La hipótesis es que el rumor es puro movimiento. La trayectoria es la boca de la señora y una oreja cualquiera. Yo soy el observador, el desplazamiento se produce como leve brisa susurrada, la dirección tiene un eje imaginario que incide por dos segundos en sus manos insistiendo en la infidelidad, en sus ojos perseverando que lo vio todo. Todo tiene un sentido. Si tomamos el rumor desde la mecánica relativista el conjunto de coordenadas espacio-temporales permiten identificar el rumor en un punto del espacio físico y en su orden cronológico de sucesos. Hablaríamos de cuatro vectores ortonormales (1 temporal y 3 espaciales); sucede con todo como con la partícula, todo tiene su cinemática. El rumor es la prisa, la velocidad del añadido, el postizo, lo que se expone frente a lo que sucedió, una visión idealizada que cristaliza realidades. El rumor es una de las pocas cosas capaz de traspasar imaginación y realidad y está sucediendo cada día, en todas las ciudades, durante la noche, es el teatro de lo real, lo real dramatizado.

6 comentarios:

Jesús Galbraith dijo...

Interesante reflexión. Podría enfocarse también desde el segundo principio de la termodinámica: todo rumor nesita propagación, transformación y toda transformación implica degeneración, degradación, irreversibilidad...
Un saludo.

Anónimo dijo...

magnífico¡¡ la rumorología que nos ocupa, los científico que nos atrapa... los dramatizable en este juego de realidades y ensoñaciones

gracias por compartirte, darnos tu visión...

silvia, granada (pronto te llamo y te hago una propuesta de visita y poesía y amigos y cerveza)

un besazo desde la sonrisa cómplice (unos patos con amigos, un lavapiés que se depila...)

Precesión del perihelio dijo...

Pues no lo entiendo.

Anónimo dijo...

apoyo al que no lo entendia XD

george dijo...

al otro lado del romur.

abrazo,
g,

Elena dijo...

se dignifica hasta lo inexistente.
mejor tildarlo todo de indigno